¿Está lista la cadena alimentaria para atender a millones de estudiantes?
- Redacción I&V News
- hace 13 horas
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Con el ciclo escolar 2025-2026 a la vuelta de la esquina, el sector alimentario en México enfrenta el reto anual de abastecer de forma segura y eficiente a más de 25 millones de estudiantes de primaria y secundaria.
Desde cooperativas escolares y proveedores de desayunos hasta cadenas de distribución de bebidas y snacks, la preparación es clave para garantizar inocuidad, calidad y cumplimiento regulatorio.
El regreso a clases no solo implica surtir más galletas, jugos o tortas; también demanda reforzar controles en almacenamiento, transporte y manipulación de alimentos, especialmente en climas cálidos donde las condiciones de conservación pueden deteriorarse rápidamente.
Abasto seguro y constante
Los proveedores deben revisar inventarios, confirmar contratos con distribuidores y asegurarse de que los puntos de venta escolar cuenten con insumos frescos y en buen estado. La trazabilidad es esencial: cada lote debe poder identificarse y retirarse rápidamente en caso de problemas.
Cumplimiento con la regulación sanitaria
En México, las escuelas están sujetas a lineamientos como los establecidos en el Acuerdo Nacional para la Salud Alimentaria y las guías de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y COFEPRIS sobre la venta de alimentos y bebidas. Esto incluye límites de azúcares añadidos, grasas y sodio, así como prohibiciones de ciertos colorantes y edulcorantes artificiales en productos para menores.
Control de proveedores y manipuladores
El regreso a clases es un buen momento para auditar proveedores, verificar certificados de calidad y renovar capacitaciones de quienes manipulan alimentos en cooperativas y comedores. Ukn manipulador sin entrenamiento en higiene puede ser el eslabón débil que desencadene brotes.
Innovación para un entorno más saludable.
Cada vez más, las escuelas y proveedores están incorporando opciones saludables como frutas frescas, botanas horneadas y bebidas sin azúcar.
Esto no solo responde a la regulación, sino también a la creciente demanda de padres por hábitos alimenticios más sanos.
Preparación ante incidentes
Tener un plan de contingencia para alertas de retiro de producto (recalls) es vital.
La experiencia de otros países muestra que los problemas de contaminación o etiquetado incorrecto pueden surgir de forma repentina, y reaccionar rápido marca la diferencia entre una crisis controlada y un problema mediático.
El regreso a clases no es solo un desafío logístico, es una prueba para la capacidad de todo el sistema alimentario escolar de proteger la salud de los estudiantes y cumplir con estándares de inocuidad. Invertir en prevención, capacitación y controles robustos es la mejor estrategia para que el ciclo escolar inicie con alimentos seguros y de calidad.
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